jueves, 30 de enero de 2020

Personajes: Manon Lescaut y el caballero Des Grieux

En esta ocasión esta sección tiene que ir compartida con la presencia de dos personajes que entraron en mi vida en los primeros momentos de mi afición a la ópera: Manon Lescaut y el caballero Des Grieux, de la versión compuesta por Giacomo Puccini, “Manon Lescaut”(para diferenciarla de la ópera “Manon” de Jules Massenet) basada en la obra del Abate Prévost en 1753 “Histoire de Manon Lescaut et du chevalier Des Grieux”. De hecho, en esa época sentía una fascinación por el personaje de él porque, en cierto sentido, jugaba con esa sensación del flechazo(¿quién no ha soñado de joven con vivir ese momento?), con ese momento en el que Des Grieux va percibiendo que su enfado con Manon, que su frialdad va desapareciendo con las palabras de ella, ese esfuerzo ciego por acercarse a ella incluso en su desgracia y ese final. De hecho, si hubiera jugado con usar un “pseudónimo” aquí, hubiera sido ese “le chevalier Des Grieux”-aunque Belmonte Lostados tampoco estaba mal situado- porque es un personaje que me gusta, aunque no implique que me vea reflejado en él.

Des Grieux, joven apuesto con cierto encanto, se queda enamorado al instante al ver bajar de una carroza a una joven llamada Manon Lescaut y que ella también percibe. Por ello, cuando se encuentran la primera vez, ella le cuenta su triste historia:debe ser conducida por su hermano a un convento. Ella ignora que en la carroza, en la que iba su hermano y Geronte de Ravoir había otros planes. Con todo, ese primer dúo trasciende amor entre dos jovenes y, con ayuda de amigos, logran huir.


Como vaticinaba el hermano de ella a Géronte, a ella no le gusta la miseria y en el estudiante es factible. Ella huye de esa pobreza y acude a la riqueza de Geronte. Des Grieux se queda entre enfadado y con pesar. El propio hermano, sabiendo la forma de ser de su hermana y el recuerdo hacia el joven, decide ayudar a Des Grieux y lo lleva hasta la casa de Geronte, aprovechando su ausencia. El encuentro entre ellos es frío porque él se siente molesto por la actitud caprichosa de ella hasta que, al final, se conciencia que su amor primero es superior a un enfado puntual. Sin embargo, la llegada de Geronte supone,según las leyes de esa época, que iba a ser detenida y condenada a un exilio forzoso.

El hermano le conduce hasta Le Havre, donde está Manon detenida y camino del destierro. Lo sencillo, aunque duro, era estar ahí en la despedida, sufrir y seguir su vida. Sin embargo, no es así y cuando se produce el llamamiento su reacción es instintiva y acaba logrando ser aceptado como mozo en el barco que llevará a Manon hasta Luisiania, en esa época perteneciente a Francia. Ese “appello” ,que ven si pulsan en el enlace, es algo memorable por todo lo que transmite: desolación en él, remordimiento en ella por no haberlo querido y el pesar del hermano narrando a los demás asistentes lo que pasa con esos dos jóvenes.


En el lugar donde es destinada Manon se produce un incidente tal que ellos logran huir y acaban en una zona árida sin agua. La debilidad de Manon amenaza ya con su vida, algo triste. Des Grieux busca agua pero no la encuentra y vuelve junto a ella. Es el final de la ópera, es la desesperación de Des Grieux mientras ella, con voz tenue, se despide: “Le mie colpe travolgerà l'oblio,ma l'amor mio... non muor...”... mis culpas se las llevará el olvido pero el amor mío no muere”.



No hay comentarios: